Hoy voy a retomar mis vivencias a partir de mi salida de aquella cocina.
Conforme vas creciendo en edad creces en experiencia y te vuelves poco a poco más fuerte.
No sabia donde empezar a trabajar.
Cuando estuve de aprendiza en la tienda de mis “desvelos” además del innombrable estaba su esposa y otra socia que era viuda. En los ratos que no había trabajo en la tienda me hacían entrar al taller (se confeccionaba ropita para bebe) y hacia juegos de cuna bordados.
Como no me había olvidado del problema que allí tuve y recordaba que la jovencita que entro en mi puesto quizá tendría el problema. Me puse en contacto con ella y también tenia que luchar contra el dichoso jefe.
Decidí ir a buscar trabajo en el mismo taller, y claro enseguida empecé a trabajar, La compañera de la tienda estaba muy contenta pues llegamos al acuerdo de entrar a trabajar a la misma hora (en el taller se empezaba media hora mas tarde) mis jefas tan contentas, era un trabajo, que cobrabas por piezas hechas, y claro sin asegurar.
Empezamos nuestras andaduras, el estaba incomodo, claro el sabia que éramos dos que lo conocíamos, y no hubo mas problemas.
En el taller lo pasábamos muy bien, éramos jóvenes y los chistes y anécdotas estaban a la orden del día. El trabajo me gustaba mucho pues siempre me gustó coser.
Tengo una anécdota muy buena mi hermana mayor siempre decía que quería ser de mayor “pianista” o “amazona” la mas pequeña maestra para pegar a los niños y yo siempre tan………quería ser modista. Fui la única que lo consiguió.
Así fue pasando el tiempo, mis padres cada vez más deteriorados y los recursos económicos en casa de mal en peor.
Me dijeron que unas vecinas del barrio algo mayores que yo habían venido de vacaciones pues se fueron a trabajar a Suiza. Quise saludarlas y al mismo tiempo interesarme de cómo les había ido la experiencia. Ellas estaban contentas y me animaron, creí ver una salida para solventar el problema de mi familia.
Manos a la obra me fui a la oficina de emigración y me informaron de que estaban formando una expedición para ir a Alemania. Yo me fui a casa muy contenta, para mis padres fue un mazazo, y como me vieron tan tozuda dijeron que teníamos que ir las dos hermanas, yo y la pequeña que tenia tres años menos (la mayor vivía desde pequeñita con unos tíos)
Nos apuntamos las dos, Yo no estaba tranquila con esta decisión y después de mucho hablar los cuatro llegamos a la conclusión de que ellos (mis padres) no debían quedarse solos.
Llegó la hora de conocer a mis compañeras de aventura, éramos siete de Huesca y dos de Monzón, todas muy jóvenes y con distintas ilusiones.
Os contaré esta aventura que para mí fue muy positiva.
Gracias por aguantar mis historias
22 comentarios:
pero josefina como aguantar tus historias? yo ya estoy deseando saber más,un beso y gracias por tus visitas.
Estimada joven doncella que no plebeya.
Me he tomado la libertad de asomarme a
este hermoso oasis para conocer ese cuerpo serrano
que termina en el blog de nuestro común amigo
de pregonar.
Y la historia me ha encantado, ya que se parece un
poco a algo similar vivido por su eterno servidor
Ruego perdone la intromisión de colarme sin llamar
Bona nit
La de vueltas que da la vida... que nunca dejará de sorprendernos...
El ímpetu que mueve a la juventud nunca debería perderse. Siento curiosidad por ese viaje.
Besos
Amiga Josefina, cómo disfruto tus vivencias. Tu vida no fue nada fácil, por eso tiene doble mérito que conserves la alegría y el entusiasmo por seguir aprendiendo y haciendo cosas, como estar por estos espacios y dejarnos tus experiencias.
Espero ansiosa tu viaje a Alemania.
Un abrazo.
Hola Josefina, aquellos eran otros tiempos y tu lanzada allá que voy. Igual lo has hecho para perder de vista al innombrable. Menuda cara. Con esos años uno se echa el mundo por montera con más facilidad. Y esas experiencias te hacen más fuertes.
Un beso y buena semana
Sabes josefina te admiro mucho tu perseverancia y me encanta leerte …me reí con lo de tu hermana menor que quería ser maestra para pegarle a los niños bueno esa era la concepción de la educación en esos tiempos mano de hierro para educar …yo le saque canas a mis maestros aunque tímida era muy cabezota …vendré a leer de tus andanzas de modista y tu viaje …te dejo mi cariño para tu alma hermosa …besos
Que ganas tengo de saber más...
Me traes recuerdos de adolescencia, conozco pueblos de por allí.
Besos.
Hola, Josefina. Tus vivencias son como un libro que voy leyendo capítulo a capítulo. Tienes mucho que contarnos todavía. Has cortado el hilo en el momento cumbre, como en una novela de suspense.
Si eres modista, compartimos profesión. Soy patronista, figurinista y diseñadora, pero de las que saben coger la aguja.
Un beso.
Querida Josefina¿aguantar? pero si me encantan tus vivencias.
Cuantas vueltas da la vida.Espero que nos cuentes esa nueva aventura.
Un abrazo
Yo pienso que nada hay que aguantar, aqui disfrutamos todos escribiendo textos, versos y relatos, ademas lo tomamos como un hobby sin agobios de ninguna clase,
es la mejor manera de poder disfrutar placidamente,
tu texto es una bonita vivencia,
gracias por compartirla,
espero la proxima aventura.
feliz semana
un beso.
Me has dejado con la miel en los ojos, quería saber el final, ¡qué pena! en fin habrá que estar atento a tu proxima entrada. Un abrazo.
Mira Josefina, nos tienes comiéndonos las uñas con tus vivencias. Son como una entrega por capítulos y, realmente, emocionantes.
Está visto que detrás de cada persona hay toda una historia digna de contar (o leer).
Un abrazo de mos desde la orilla.
Hola Josefina. A mi también me encantan!. Estoy deseando que actualices. Hazlo pronto, porfi.
Un beso
Para una como lectora, leer tus historias de vida viene a ser como tener acceso a tu diario de vida (un género literario por lo demás)... es bello cuando el relato de las vivencias personales, nos recuerda la universalidad que hay en las emociones y sentimientos humanos, nos hermana y borra las estúpidas diferencias.
Un abrazo!
Lo primero que me surge decirte:
Yo personalmente no aguanto tus historias, las leo y comparto en cierta medida lo que has vivido, en cierta medida porque cada una ha tenido la suya, pero por lo cultural se asemejan en algunas cosas.
Me encanta ver lo emprendedora que ya eras, y parece ser que con un fuerte carácter :). La vida va poniéndonos en el camino aquello que nos hará conectarnos con nosotros mismos, saber de que somos capaces. Y ya veo que tu espíritu es el de un alma con grandes ganas de aventura. Porque aunque fuera para trabajar, era ir a un mundo nuevo y desconocido, y además con tan poca edad.
Me alegra saber también que consiguieras dejar fuera de juego al hombre que vivía tan confundido, y además en su terreno de juego :)
Un cariñoso abrazo y ¡Buenos días! :)
No nos dejes así!
Muero por la próxima entrega...
Y después? Qué pasó?
¡¡que buena idea tuviste de "rescatar" a tu sustituta¡¡, fue muy inteligente. Espero tu próxima entrega. gloria
Me gusta venir a leerte..
Que tengas un lindo día
Abrazos
BB
Josefina me gusta que nos cuentes tus vivencias, vivencias de toda una vida, son tuyas nada más y solo tú nos puedes contar, tus experiencias, tus alegrías, tus penas y todos los sentimientos que has podido llegar a sentir.
Mis suegros también emigraron a Alemania y tienen buenísimos recuerdos, con muy buenos amigos por allá.
Espero tu próxima vivencia.
Saluditos.
Yo las aguanto como tu dices, pero con mucho gusto.
Un abrazo
A mí también me gusta leerte Jose voy a volver por más.
Un beso
Nos tienes encadiladas con tus historias, tantos años conociéndonos y no me habías contado ni la milésima parte de tu vida, menos mal que lo haces a través del blog. Un abrazo. MCM
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