Ese gran simulacro
Cada vez que nos dan clases de
amnesia
como si nunca hubieran existido
los combustibles ojos del alma
o los labios de la pena huérfana
cada vez que nos dan clases de
amnesia
y nos conminan a borrar
la ebriedad del sufrimiento
me convenzo de que mi región
no es la farándula de otros
en mi región hay calvarios de
ausencia
muñones de porvenir / arrabales
de duelo
pero también candores de
mosqueta
pianos que arrancan lágrimas
cadáveres que miran aún desde
sus huertos
nostalgias inmóviles en un pozo
de otoño
sentimientos insoportablemente
actuales
que se niegan a morir allá en lo
oscuro
el olvido está lleno de memoria
que a veces no caben las
remembranzas
y hay que tirar rencores por la
borda
en el fondo el olvido es un gran
simulacro
nadie sabe ni puede / aunque
quiera / olvidar
un gran simulacro repleto de
fantasmas
esos romeros que peregrinan por
el olvido
como si fuese el camino de
santiago
el día o la noche en que el olvido
estalle
salte en pedazos o crepite /
los recuerdos atroces y de
maravilla
quebrarán los barrotes de fuego
arrastrarán por fin la verdad por
el mundo
y esa verdad será que no hay
olvido
Reseña biográfica;
Poeta y novelista uruguayo nacido en 1920 en Paso de Los Toros.
Recibió la formación primaria y secundaria en Montevideo y a los dieciocho años se trasladó a Buenos Aires donde residió por varios años. En 1945 formó parte del famoso semanario «Marcha» donde se formó como periodista, colaborando allí hasta 1974.
Ocupó el cargo de director del Departamento de Literatura Hispanoamericana en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Universidad de Montevideo.
Desde 1983 se radicó en España donde permanece la mayor parte del año. Obtuvo el VIII Premio Reina Sofía de Poesía y recibió
el título de Doctor Honoris Causa por la Universidad de Alicante.
Su vasta producción literaria abarca todos los géneros, incluyendo famosas letras de canciones, cuentos y ensayos, traducidos
en su mayoría a varios idiomas.
De su extensa obra se encuentran entre otros, la novela «Gracias por el fuego», «El olvido está lleno de memoria», y los poemarios, «Inventario Uno» e «Inventario Dos».
Falleció en Montevideo en mayo de 2009. ©
11 comentarios:
Único, Mario Benedetti, que en paz descanse. Sabes, llegué a su editorial justo cuando el se fue, pero de alguna manera me siento su compañera.
Hermoso poema el que elegiste.
Un abrazo, Josefina.
Es uno de mis poetas favoritos. Es sumente sensible y cercano.
Un abrazo
Las personas no pueden olvidar las vicisitudes que han pasado las injusticias que esos ojos han
contemplado en otros tiempos.
Tampoco pueden olvidar las ilusiones y alegrías que les han llevado siempre a soñar con otras formas de vida donde primase el amor y el reparto social para
todos .
Magnifica entrada con este gran poema
Mira que casualidad, ayer me compré un libro de él. Vivir adrede, le empecé anoche mismo, y voy señalando algunas reflexiones para llevarlas al blog.
Me encanta lo que nos has puesto.
Un beso.
Como uruguaya reconozco que Benedetti como escritor era muy bueno ,pero la verdad que nunca fuí muy seguidora de el por diferentes razones,un abrazo
Benedetti es único.
Un beso Josefina
No, no hay olvido, en algún momento los recuerdos llegan.
Un abrazo
Yo lo amo poeta que fue !... Benedetti...te dejo mi cariño siempre para ti Josefina ...y besos
Don Mario, ese hombre al que todavía lloramos, y que un buen día se convirtió en inmortal.
Hermosísimo poema.
Uno de mis poetas favoritos.
Besos.
Real y triste.
Cariños
Publicar un comentario