Vivencias

Imagen de Internet

Josefina, orgullosa de haber nacido mujer. Deseosa de conseguir cada día mas derechos para nosotras alrededor del mundo. Es terrible ver tanta desigualdad, y machismo, sentir como las mujeres son pisoteadas en sus derechos y muchas veces humilladas y vejadas por religiones o leyes ancestrales.


Me siento privilegiada, en casa solo fuimos niñas y entonces nunca nos sentimos subvaloradas en detrimento del hermano, que era lo que pasaba en esos tiempos en que nací. Los chicos eran el sexo fuerte y la chica la que había que defender, privar de libertad, y sobre todo enseñar las labores propias de la casa, ufffff, que horror.

Yo desde mi más tierna infancia, no fui muy comprendida, era tímida, miedosilla, pero inquieta, aunque muy manejable.

Me encantaba hacer cosas que pensándolo al paso del tiempo, creo que era señal de una cabecita deseosa de descubrir el porque de las cosas. De allí mi manía de ver siempre los juguetes por dentro, mi madre me reñía, pues los juguetes me duraban como se dice ahora “dos telediarios”. Claro ella no se dio cuenta que lo que quería, era, no el romper el juguete, si no ver su funcionamiento, eso no era malo. A mi, hacer siempre una cosa monótona y simple era soporífero y me ponía mal.

En el colegio no fui una lumbrera, claro que tampoco fui mala estudiante. Se dieron un sinfín de problemas en mis últimos cursos, el más importante y que más me marcó fue la enfermedad de mi madre, para cuidarla faltaba mucho a clase, tanto que un curso más de la mitad fueron faltas justificadas.

Otra experiencia, de mi inquietud la tuve, cuando en mi trabajo en Alemania me pusieron a trabajar con piezas muy pequeñas y un trabajo muy monótono, me dormí dos veces, el encargado de la sección me reñía y le contestaba que a mi ese trabajo tan……

me dormía. Se enfado y me llevó al despacho del ingeniero. Yo les explicaba que esa clase de trabajo, yo no podía con él, les hizo gracia y me cambiaron, entonces pasé a unos aparatos que eran para controlar las piezas terminadas y ajustarlas para su uso. No volví a dormirme, era feliz.

Aun ahora, aunque he sido modista mucho tiempo, prefiero hacer bricolage que una labor de ganchillo, bordado……

Menos mal que ahora a la madurez, (vejez) he descubierto Internet y sobre todo el mundo bloquero, delante del portátil paso mucho rato y me encanta.

Para las redes sociales creo que es un poco tarde pues soy un poco lenta con el teclado, pero veo que poco a poco voy mejorando.

Ahora tengo un nuevo trabajo, ayudar en el cuidado de mi nietecito, solo siento estar tan “cascadilla” y cansarme tanto, el día que lo cuido no tengo ganas ni de abrir el portátil, pero claro Pau, para mí es algo regalado y una sonrisa me llena de felicidad y ganas de vivir.

Hoy creo que después de tantos días sin contaros vivencias me he pasado un poco.

Buen día para tod@s



Os diré algo hoy con el corrector solo he cometido errores de acentos, y una h que no tenía que estar, estoy contenta.

Mi nuevo trabajo